El acoso en las aulas ha evidenciado una problemática de gran impacto social y con la incursión de los menores en las redes sociales, el inconveniente ha dejado una puerta abierta para la violencia y el hostigamiento virtual.
La evolución de las nuevas tecnologías de la información ha generado un nuevo ambiente social para la población infantil y adolescente, debido a que les ha permitido relacionarse en un contexto diferente, explorar nuevas formas de interacción y generar redes sociales entre pares. Sin duda alguna, los jóvenes han evidenciado preferencia por el internet satisfaciendo sus necesidades de ocio, entretenimiento y acceso a información de carácter académico. De igual forma, la participación de los usuarios gracias a esta herramienta y a la incursión de las redes sociales ha incrementado significativamente, dejando ver los principales intereses de los internautas y la vulnerabilidad a la que se encuentra expuestos.
En este sentido, nacen algunos interrogantes en relación a términos de seguridad informática, riesgos, hábitos, beneficios y cuidados en el uso de la red, ya que los abusos han traspasado las aulas educativas y ahora están más activos en la web. En los últimos años el bullying y el ciberbullying han tomado mucha fuerza en el campo social y jurídico; numerosas investigaciones al respecto evidencian los métodos para actuar en contra de esta problemática y, de este modo, minimizar sus efectos negativos.
Así mismo, se han identificado diferentes contextos típicos y conductas de riesgo que aumentan la vulnerabilidad de los usuarios en las redes sociales, dejándolos expuestos al matoneo y a la intimidación, bien sea por excesiva exposición de datos privados, interacción con seudónimos, hackers, búsqueda de pornografía, ente otras, dándole así un mal uso a los posibles beneficios y oportunidades que brinda la internet.
Para nadie es un secreto que desde hace algún tiempo el tema de violencia escolar ha llamado la atención de la sociedad en la que vivimos, donde los factores de intolerancia, convivencia y abusos han sido determinantes a la hora de identificar el acoso; pero resulta más preocupante tratar temas como el bullying a través de las redes sociales, ya que las víctimas son atacadas a través de los medios electrónicos, donde sólo el afectado tiene acceso por tratarse de cuentas personales.
En muchos casos los niños y adolescentes que están siendo víctimas de ciberbullying toman la decisión de callar los abusos de los cuales son víctimas, llevándolos, desafortunadamente, a cuadros de depresión, aislamiento y, en los peores casos, al suicidio, situaciones que hacen más complejo identificar el problema y avanzar hacia posibles soluciones a través de ayuda profesional.
Según estudios publicados por Internet Word Stats, la penetración de los usuarios en internet es del 34% a nivel mundial. En Estados Unidos esta penetración registra un 78%, seguido de Europa con un 63% y finalmente Latinoamérica con un 42%. Con respecto a Colombia, el Ministerio de Tecnología de la Información y Comunicación (MinTIC), aseguró que para finales del 2013, 8 de cada 10 colombianos se mostraban activos en internet.
Con base en estos estudios, la Universidad de la Sabana realizó recientemente una investigación donde encuestaron a 180 estudiantes entre los 12 y 18 años de los estratos 4,5 y 6, con el objetivo de responder a los siguientes interrogantes con respecto a al uso de las TIC:
¿Cuáles son los principales riesgos y beneficios a los que se ven expuestos los adolescentes en Bogotá por el uso de esta herramienta?
¿Cómo la están utilizando?
¿Qué percepción tienen de ella?
Y los resultados que expuso Ernesto Martín, profesor de la Facultad de Psicología de la Universidad de la Sabana y director de esta investigación, fueron:
El promedio de edad de iniciación de los estudiantes en internet es de los 9 años.
El 68% de los adolescentes se conectan diariamente, el 30% entre 3 y 6 días y el 2% una o dos veces a la semana.
El 32% de estudiantes se conectan tres horas al día, un 20% cinco, el otro 20% entre una y tres y el 6% restante una hora o menos.
El 89% de los jóvenes se conectan desde su casa, el 5% desde el colegio, el 4% desde una consola de videojuegos y el 2% desde un café internet.
27% ingresan a Facebook, el 2% a Skype, el 17% a Google, el 1% a YouTube, el 10% a Hotmail, el 6% chatea, el 3% juega en línea, el 2% ve pornografía y el 1% hace apuestas.
45% de los jóvenes se conectan para interactuar, el 19% por distracción, el 13% para descarga música y videos, el 12% para fines académicos, el 7% para buscar información de interés personal, el 3% para conocer gente y el 1% para escapar de la cotidianidad.
Estos resultados demuestran que los menores se encuentran muy activos en la web, por lo que es indispensable concientizar a los niños y los jóvenes con respecto a la responsabilidad al momento de ingresar a internet y tomar las precauciones necesarias para evitar el matoneo virtual a través de estos medios, de este modo se pueden mitigar las conductas de riesgo.
De otro lado, es aconsejable que esta responsabilidad no sólo sea de los jóvenes usuarios, sino también
de los padres de familia, quienes deben estar atentos de las actividades que realizan sus hijos.
Estos son algunos de los videos que evidencian las consecuencias del ciberbullying:
Finalmente, utilizar la educación como mecanismo para prevenir la violencia es una de las opciones más acertadas con el acompañamiento de docentes y psicólogos expertos para tratar casos especiales oportunamente. Así mismo, no callar la violencia digital y buscar ayuda es la primera opción.
Nelly Cortes
@NellyCortes_
Coordinadora de Análisis de Social Media
SISGECOM
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